Que difícil se hace estar lejos de la gente que quieres.
Que difícil es no estar en casa, en los momentos únicos e irrepetibles…
Que extraño es ver como tu hermana pequeña se hace mayor.
Que extraño es ver como las cosas cambian….
Cuando una hermana recorre cientos de kilómetros, para asistir a la ecografía, en la que se sabrá el sexo de su sobrino@, la víspera no podría vivirse de otra manera, que luciendo tripita. Porque no hay motivo por el cual, no fotografiar cada instante de un embarazo, y porque las titas son únicas -madres disfrazadas de amigas- y porque también son parte de esta nueva etapa…
Una tarde divertidísima, en la que las risas fueron la banda sonora, y en la que las miradas de ternura y complicidad se sucedían entre estas hermanas.